Bolso de hexágonos con telas azules

Este bolso de hexágonos y mini hexágonos de telas azules es uno de los proyectos de patchwork en los que he estado trabajando todo este tiempo. Ya habíais visto un pequeño avance pero hoy al fin está terminado y listo para estrenar.

Como ya os adelanté, el bolso es uno de los modelos del libro de patchwork de Natsuko Mikami: 어른스러운 색깔의 가방. 베이지 브라운 블랙 그레이 컬러로 만드는 ('Bolsos de colores: Beige, marrón, negro y gris').

Desde la última vez que os puse al día con el bolso, he realizado un cambio importante en la forma de llevarlo. Ha pasado de ser un bolso con dos tipos de asas (una larga para llevarlo cruzado y otra más pequeña para llevarlo en la mano), a tener sólo unas asas de tamaño intermedio para llevarlo colgado al hombro.

Las dimensiones del bolso (43 cm de ancho, 34 cm de alto y 12 cm de fondo), que son perfectas para llevar los trabajos de costura y ganchillo, han hecho que al final me incline más por llevarlo al hombro. El bolso es grande para llevarlo en bandolera y sé que me voy a cansar enseguida de tener que llevarlo siempre en las manos. Por eso, lo mejor para mí son unas asas un poco más largas con las que también pueda llevarlo al hombro.

Las asas son de cuero negro sintético, tienen unas medidas de 62 cm de largo x 1,3 cm de ancho y podéis encontrarlas en Ideas patch&quilt.

Detalle de los mini hexágonos

El interior del bolso con la tela de corazones en azul y varios bolsillos, la cremallera en azul y el borde del bolso rematado con una cinta al biés, hecha con las mismas tiras de telas que los hexágonos, son algunos de los detalles que destacan del bolso.

Después de hacer dos bolsos, éste de hexágonos y otro de rayas, y un monedero con boquilla tengo claro que para este tipo de trabajo, con tantas telas de una misma gama, una buena opción es comprar un rollo de telas (fabric jelly roll). Así no te vuelves loca buscando telas que combinen bien porque las del rollo están bien combinadas y, aunque parezca que la cantidad de tela es pequeña, os aseguro que dan para mucho.

Lo mejor de un trabajo bien hecho es la satisfacción de decir que es algo que has cosido tú misma cuando te preguntan dónde has comprado el bolso. Y ahora sí, ya estoy lista para estrenarlo.