El otro día, buscando una caja para guardar los trozos de tela de las clases de patchwork, me sorprendí con la cantidad de telas que he reunido en un año de clases. A las que compré al principio para la colcha se han ido sumando otras que he utilizado para los distintos proyectos que iba cosiendo al mismo tiempo que la colcha. Para ir aprovechando todos esos retales decidí coser algo pequeño, como este mini monedero para colgar del cuello.
De todos los trozos que me han quedado hay dos telas de la misma colección que me gusta mucho cómo combinan. Ambas tienen el mismo diseño de flores grandes, una con el fondo en turquesa, que he utilizado para el exterior del monedero, y la otra con el fondo en rosa, para el interior. Las medidas del monedero son 9,5 cm de alto y 8 cm de ancho.
Los monederos de este tipo que he visto llevan un cordón para colgarlo y, aunque al principio iba a forrar un cordón con tela (como hice en el neceser para el bolso), creo que con una tira de tela sin cordón será mucho más cómodo, sobre todo si se lleva mucho tiempo colgado. La tela de esta tira es la del fondo de la colcha, en color claro, y mide 1,75 cm de ancho y 73,5 cm de largo.
Para el cierre he colocado un trozo de velcro en vez de cremallera, resulta mucho más cómodo de abrir y cerrar y así también se puede ver la tela del interior al abrirlo.
El monedero y la tira para colgar llevan una capa intermedia de guata, para acolcharlo y para que la tira sea más cómoda de llevar en el cuello. Normalmente no llevo este tipo de monederos pero viendo los que llevaban unos amigos al ir de viaje (como éstos), me ha parecido una buena idea para llevar lo esencial y poder guardarlo bajo la ropa sin que se note.
Ya he tenido la oportunidad de comprobar que es muy cómodo y útil para llevarlo de viaje bajo la ropa. Además, con otros retales de tela he aprovechado para coser también una cartera portadocumentos.
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